1. ¿Abdominales Tradicionales o Hipopresivos?

Los abdominales tradicionales ya son historia. El nuevo método para trabajar los músculos de la cincha abdominal, se basa en la postura y en la respiración, y como todo, en la perseverancia.  ¿Son los Hipopresivos una moda o una necesidad real? y  ¿son realmente tan eficaces como se dice?.

Existen dos principales razones por las cuales evitar hacer abdominales tradicionales, o por lo menos, no realizarlos de manera constante; el aumento de la presión intra-abdominal, pudiendo debilitar a largo plazo la musculatura del suelo pélvico, además pueden ser también perjudiciales para la columna vertebral en la zona lumbar, por aumento de presión entre los discos intervertebrales.

Trabajar los abdominales sin sudar ni arquear la espalda, sólo a través de la apnea. Muchas famosas están alabando los beneficios de los hipopresivos, para recuperar la zona abdominal tras la maternidad. Esto ha hecho de estos ejercicios una rutina deportiva que va más allá del postparto. Pero hemos de tener cuidado, los vídeos de los gurús de Youtube no son en este caso la mejor guía para hacer gimnasia hipopresiva. Lo ideal es que un fisioterapeuta especialista en suelo pélvico  realice una buena historia clínica y también una exploración. De lo contrario,  todo el trabajo puede ser en vano, o resultar incluso más perjudicial, dañando la musculatura.

 

 

Los ejercicios hipopresivos, de hecho,  fueron creados como alternativa más saludable a los ejercicios tradicionales que se venían prescribiendo. Una forma de ejercitación global pues integra entrenamiento abdominal, postural y del suelo pélvico simultáneo, tres puntos fundamentales en la recuperación después del embarazo.

Entre las recomendaciones de la Asociación Española de Fisioterapeutas (AEF) en relación al postparto inmediato y tardío se encuentra la realización de gimnasia hipopresiva.

En definitiva, se trata de un método holístico que considera al cuerpo como un todo y concibe el entrenamiento de forma global, integrando la postura y la respiración, con especial atención al cuerpo de la mujer.

 

2.¿Qué es la Gimnasia Abdominal Hipopresiva?

Las primeras técnicas hipopresivas fueron creadas en 1980 por Marcel Caufriez en el Hospital Universitario Erasme en Bruselas. En aquella época, el Dr. Caufriez estudió la importancia de recuperar el tono abdominal en el post-parto para prevenir la aparición de hernias genitales, el debilitamiento de los músculos del Suelo Pélvico, la Incontinencia Urinaria a medio – largo plazo.

Hay tres tipos de ejercicios Hipopresivos: Gimnasia Abdominal Hipopresiva, Aspiración Diafragmática y Técnicas de Transferencia Tensional.

El ejercicio hipopresivo se caracteriza por trabajar en diferentes posturas y por el uso y control de un patrón respiratorio característico, lo que resulta en un “vacum abdominal”. Trabajaremos en una determinada postura en apnea, así trabajaremos sin presión; esto es clave para ejecutar con éxito las técnicas hipopresivas. Éste se traduce en una succión literal sobre las vísceras pélvicas y en una disminución de la tensión ligamentosa. De manera correcta y supervisada por un profesional, logran una tonificación de la musculatura abdominal profunda y del periné.

Antes de sufrir incontinencia, la falta de tono muscular en el suelo pélvico puede avisarnos de varias maneras: vagina abierta (ya porque se produzcan ruidos o porque entra agua), sensación de peso en la vagina y periné, pérdida de calidad en las relaciones sexuales y abdomen prominente en perosnas delgadas. Los hipopresivos son más efectivos sobre la faja-cincha abdominal o CORE. Además de fortalecer el abdomen, afinan cintura y fortalecen el suelo pélvico.

 

3.¿Qué conseguiremos con la Práctica de los Hipopresivos?

Uno de los efectos de la práctica a medio y largo plazo de estos ejercicios es la recolocación visceral. Un estudio de Latorre et al. (2011) pone de manifiesto, mediante resonancia magnética, el comportamiento de la musculatura pélvica, útero y vagina durante la maniobra de aspiración diafragmática del hipopresivo, y la variación del ángulo entre útero y vagina en relación al reposo.

La práctica regular de los ejercicios de GAH provoca a corto, medio y largo plazo, efectos positivos para la salud, a nivel postural, respiratorio, vascular, metabólico, sexual y realiza una perfecta prevención de las hernias anatómicas en particular en la mujer, en el campo del descenso de los órganos pelvianos y de la Incontinencia Urinaria. En un mes de trabajo hipopresivo a diario notarás los primeros cambios. En seis meses, los verán los demás.

 

 

 

 

4.¿Cuáles son las indicaciones de las técnicas hipopresivas?

¿Qué podemos tratar con técnicas hipopresivas? No solo mejorará nuestra postura, sino que disminuirá la presión abdominal, se producirá una relajación de nuestro diafragma torácico y activaremos nuestra faja abdominal y suelo pélvico.

Las indicaciones de los hipopresivos son muchas, destacamos:

-Postparto a 3 meses después del parto.

-Cervicalgias funcionales.

-Astenia

-Incontinencia Urinaria de Esfuerzo.

-Dorsalgias funcionales.

-Ptosis Pelvianas (prolapsos de órganos, según el grado).

-Lumbalgias funcionales.

-Disfunciones vasculares.

-Síndrome del Obturador Interno o Piramidal.

-Disfunciones respiratorias (asma, apnea, sueño).

-Tonificación de la faja abdominal.

-Diástasis Abdominal.

 

 

 

5.¿Cuando no hacer G.A.H?

Las contraindicaciones principales son:
a) La hipertensión arterial. En caso de tratamiento médico de esta afección, y siempre de acuerdo de su médico de cabecera, el fisioterapeuta especialista podrá aplicarle un tratamiento hipopresivo individual (T.T.T.) con control óptimo de su tensión arterial y de su variabilidad de frecuencia cardíaca. En estos casos la práctica de la gimnasia abdominal en grupo no está permitida.

b) Si estas  embarazada, la práctica repetitiva de los ejercicios podría desencadenar contracciones del útero y provocar un parto prematuro o un aborto natural; sin embargo, un programa hipopresivo específico de preparación para el parto adaptado a su situación obstétrica es propuesto a las mujeres embarazadas a partir del cuarto mes de embarazo, siendo aplicado y controlado bien por un fisioterapeuta o bien por una matrona, ambos especializados en técnicas hipopresivas. El objetivo de estos ejercicios es mejorar las contracciones del útero en el momento del parto y facilitar la expulsión del bebé.

c) Si acabas de dar a luz, es preferible, salvo objeciones de su ginecólogo u obstetra, abstenerse de practicar ejercicios hipopresivos durante 6 semanas (por los riesgos que conlleva de impedir la involución del útero).

d) Si tienes problemas articulares de cadera, de rodillas o de hombros, tu fisioterapeuta deberá ajustarte un programa personalizado de ejercicios hipopresivos. En estos casos, por razones evidentes, la gimnasia hipopresiva colectiva estaría desaconsejada.

El profesional de la Salud especializado en técnicas hipopresivas, utiliza con sus pacientes (o sus deportistas), en su campo de competencia, una batería de pruebas que permiten fijar los límites de la práctica hipopresiva y adaptar los programas en función de las posibilidades de cada uno.

 

Ana Belén González

Fisioterapeuta

Máster en Pelviperineología